Me la juego con Yacine Brahimi

Muchas veces  la percepción que tenemos de un futbolista y la realidad que muestran los números difieren de tal manera, que se enciende una luz roja de alarma. Algo falla. Es el momento de repasar los datos y de revisar nuestras ideas.

Brahimi es el paradigma de ese tipo de futbolistas. Estéticamente llamativo, apenas suma goles y asistencias. Granada no es la mejor plaza para destacar en talento ofensivo y aunque parecía que el argelino por fin iba a brillar en la temporada 13-14, su paso por el club nazarí se podría resumir, siendo un poco crueles, en una serie de recortes que no sirvieron para nada. Yo le apodaría “el ministro”.

©Foto: kingfut.com

El fichaje del mundialista por el Porto se presenta como la gran oportunidad de clarificar si se trata de gaseosa o de champán.  La capacidad para driblar contrarios podrá beneficiarse en un club que dominará y será más ofensivo. También influirá su posición, cuanto más cerca del área más se potenciarán sus virtudes y se minimizarán sus defectos. Si, por fin, acompaña sus habilidades de buenas finalizaciones, ya sean individuales o de compañeros, podrá aumentar sus cifras de manera significativa.  

En el debe queda esa toma de decisiones mejorable, la tendencia a perderse o quedarse sin fuerzas por el camino hacia el gol cuando arranca desde atrás y su completa inhibición defensiva. Quizás sea demasiado pedir que, de repente, pula todos esos defectos. Aún así por 6,5 millones de euros se puede decir que, aunque las dudas sobre su rendimiento son razonables, el Porto hace un negocio con un riesgo medio, asumible. Mientras desvelamos quién es Brahimi, se queda como un fichaje más de la gran cantidad que está haciendo el club que dirige Pinto da Costa y que lo convierten en una gran incógnita.

YACINE BRAHIMI

AÑO: 90

PROCEDENCIA: GRANADA

POSICIÓN: MEDIAPUNTA

VALORACIÓN DEL FICHAJE: 6/10